En este post se explica en qué consiste la morfología verbal y qué estudia. Además, podrás ver varios ejemplos de verbos analizados morfológicamente.
Índice
¿Qué es la morfología verbal?
La morfología verbal es la rama lingüística que estudia la conjugación de las formas verbales. Es decir, la morfología verbal se encarga de analizar morfológicamente las conjugaciones de un verbo.
Principalmente, una verbo conjugado está formado por el lexema (o raíz léxica) y los morfemas verbales (o desinencias verbales). El lexema aporta el significado principal a la palabra y, por otro lado, los morfemas verbales indican el tiempo, el modo, el aspecto, la voz, el número y la persona de la conjugación verbal.
Por ejemplo, la morfología verbal permite analizar la forma verbal cantando, que está compuesta por el lexema cant-, la vocal temática -a- que indica que es un verbo de la primera conjugación y, por último, el morfema verbal -ndo que expresa que el verbo está conjugado en gerundio.
Cómo determinar el lexema de un verbo y sus morfemas verbales
Como hemos visto en el apartado anterior, para entender qué significa la morfología verbal es importante entender el concepto de lexema y de morfema.
Para determinar el lexema de un verbo simplemente debemos eliminar la terminación -ar, -er o -ir de su infinitivo. No obstante, este truco no se cumple absolutamente en todas las veces, pero sí en la gran mayoría. Asimismo, el resto de partículas morfológicas que quedan de la conjugación verbal son los morfemas verbales.
Por ejemplo, para identificar el lexema de la forma verbal cantábamos basta con quitar al infinitivo (cantar) la terminación característica de la primera conjugación -ar, de manera que la raíz verbal es cant-. Por lo tanto, los morfemas verbales de la forma conjugada son -ábamos.
Por otro lado, para separar la parte variable de la forma verbal en los diferentes morfemas verbales, nos tenemos que fijar en el resto de conjugaciones del mismo tiempo verbal.
Así pues, siguiendo el ejemplo, la forma verbal cantábamos corresponde a la primera persona del plural del pretérito imperfecto del modo indicativo del verbo cantar. De modo que el resto de conjugaciones de este tiempo verbal son:
cantaba
cantabas
cantaba
cantábamos
cantabais
cantaban
Como puedes ver, aparte de la vocal temática -a- típica de los verbos de la primera conjugación, las letras que se repiten en todas las formas verbales son -ba-. Así que el morfema verbal que indica el tiempo, el modo y el aspecto es -ab- y, por otro lado, el morfema verbal que indica el número y la persona es el conjunto de letras que viene a continuación (si hay).
En conclusión, la forma conjugada cantábamos se analiza morfológicamente de la siguiente manera:
cantábamos
- Lexema: cant-
- Morfema verbal de vocal temática: -á-
- Morfema verbal de tiempo, aspecto y modo: -ba-
- Morfema verbal de número y persona: -mos
Ejemplos de morfología verbal
A continuación, se procede a analizar varias formas conjugadas a modo de ejemplo para que puedas acabar de entender en qué consiste la morfología verbal.
Ejemplo 1
escribían
- Lexema: escrib-
- Morfema verbal de vocal temática: -í-
- Morfema verbal de tiempo, aspecto y modo: -a-
- Morfema verbal de número y persona: -n
Ejemplo 2
jugaré
- Lexema: jug-
- Morfema verbal de vocal temática: -a-
- Morfema verbal de tiempo, aspecto y modo: -ré
- Morfema verbal de número y persona: Ø
Ejemplo 3
corrierais
- Lexema: cor-
- Morfema verbal de vocal temática: -ie-
- Morfema verbal de tiempo, aspecto y modo: -ra-
- Morfema verbal de número y persona: -is
Morfología verbal y morfología flexiva
En este apartado veremos cuál es la diferencia entre la morfología verbal y la morfología flexiva, ya que son dos conceptos lingüísticos estrechamente relacionados.
La morfología flexiva es la rama lingüística que estudia la flexión de las palabras, o dicho de otra forma, la morfología flexiva se encarga de analizar las variaciones de las palabras sin cambiar su categoría gramatical. Además, dentro de la morfología flexiva se distinguen dos procesos morfológicos: la flexión nominal (cambio de género o número) y la flexión verbal (cambio de forma verbal).
En concreto, la flexión verbal es el proceso lingüístico que estudia la morfología verbal y que se ha explicado a lo largo del post. En conclusión, la morfología verbal se encuentra dentro del concepto de morfología flexiva.
Morfología verbal y morfología léxica
Por último, veremos cuáles son las diferencias entre la morfología léxica y la morfología verbal, pues si bien ambas ramas lingüísticas estudian la relación entre lexemas y morfemas, cada una se centra en una parte diferente.
La morfología léxica es la rama de la lingüística que estudia la creación de nuevas palabras. Así pues, se divide en el proceso de derivación, que se basa en crear una nueva palabra añadiendo un morfema derivativo a un lexema, y el proceso de composición, que consiste en formar un nuevo término uniendo lexemas.
Por lo tanto, la principal diferencia entre la morfología verbal y la morfología léxica es la creación de nuevas palabras. La morfología léxica estudia la creación de nuevas palabras, en cambio, la morfología verbal se encarga de analizar morfológicamente las diferentes conjugaciones de un verbo, pero no crea nuevos verbos.
